Una vida que termina para que otra dé comienzo
Una llama que se apaga porque no hay más leña
Una gota de pintura que escapa fuera del lienzo
Hacia un lugar con el que las demás solo sueñan
Un futuro incierto y misterioso, pero tuyo
Cierra una puerta y abre una ventana con rejas
Sangre tragada, antes que el orgullo
Un cuento que no parece tener moraleja
Una noche desvelado, mil noches en vela
Una luz que te ilumina y a la vez proyecta sombras
Una manta que da calor a un alma que se hiela
Sentir que la vida pasa y ya nada te asombra
Un vacío en tu interior que antes llenaba su sonrisa
Una calma y un silencio donde antes oías su voz
Un grito al cielo rogando que el tiempo pase deprisa
Una lágrima, seguida de un millón…
Un adiós, un hasta siempre
Mariposas muertas en tu vientre
Un corazón sigue pendiente
Mientras que otro ya no siente
Un hasta siempre, un adiós
Se apaga la llama que daba calor
Pero hay que tener valor…
Porque la vida es dura
Y nadie tiene la cura
Para este puto dolor…
Ryko
(Además de experiencia propia, también me ha inspirado un amigo, que está pasando por momentos difíciles ahora. Ánimo.)